Peregrinaje

Bautizado, comunionado  y confirmado,  me confieso antirreligioso. Habiéndola cagado con los tres anteriores, he decidido ejercitar mis rebeldes convicciones contra el sexto sacramento, el Matrimonio, y así ya llevo dos churumbeles sin anillo que me decore.  Haber terminado de peregrino era algo que sólo podría ocurrirme sin querer.

No dudaría ni un minuto en ir al pueblo de Bethel, a la finca de Max Yasgur donde tuvo lugar el concierto de Woodstock para conocer el lugar donde Jimi se hizo (aún más) eterno; o incluso a subirme a las torres gemelas de la Catedral de Nuestra Señora de Múnich a doblar las campanas para que al amado Pep no le entrase morriña de campanarios: ambos auténticos dioses, vivos o muertos.

Pero los fines de semana sin fútbol deberían estar prohibidos, no tanto por lo que se echa en falta nuestro opio dominical, sino por la cantidad de cosas que se pueden hacer cuando no hay partidos, algunas de ellas peligrosísimas para la salud y, sobre todo, los principios. 

Porque sólo en esa situación de vacío existencial sin fútbol puede acceder un hombre a llevar a la familia a un acuarium gigante en la inhóspita ex colección de chimeneas y hoy colección de centros comerciales y de ocio que es Oberhausen: otra de las urbes de la cuenca del Rühr, se encuentra edificada a orillas de un canal, el Emscher, y es famosa en Alemania por poseer el mayor centro comercial de Europa: el CentrO, a la vanguardia del horterismo germano, en cuyas inmediaciones se encuentra el acuario Sea Life, siguiendo la misma línea de originalidad en los nombres que les caracteriza.

A 0 grados centígrados y con brisilla moscovita, la cola de apenas 35 metros se antojaba cortita, y además la familia podía esperar dentro.  Una hora y media después, conseguí arrancarme la estalactita de la nariz y me reté internamente a descubrir algo sobre los océanos que desconociese y que justificase, aparte de la sonrisa de mi hijo, el enorme precio en años de vida que estaba pagando en ese lugar. Sin éxito.

Llegando ya al final, con un humor muy mejorable, sofocado por esa extraña atmósfera de piscina cubierta de barrio que impregnaba todo, buscando la salida desesperadamente y la familiaridad de esta primavera polar, me vi de repente frente al altar mayor de Santa María de las Flores de Florencia, a los pies del frontal de la Catedral de Colonia, y ante el mismísimo Santo cubierto en oro en Santiago, pero todos a la vez:

La visión era subyugante.
¿Qué misteriosa fuerza podría haber me llevado hasta allí? Llegar a semejante lugar de forma aparentemente inconsciente, sin haberme acordado de que los restos mortales del principal responsable de que campeonáramos en Sudáfrica reposaban idílicamente a apenas 30 minutos de mi casa: ¿existen realmente estas coincidencias? Como cuando un padre le murmura a su hijo "no te olvides de dar las gracias" al recibir un caramelo, medio exultante por el regalo y medio avergonzado por tener que humillarme, me acerqué a esa pelota colorista y me abracé a esos tentáculos. Y Paul sonrió, y me susurró al oído: "llevo tres años esperándote, cabrón"

Reflexionando tras el éxtasis teresiano que acababa de vivir, la mirada perdida en el horizonte mientras desfilábamos por la autopista de vuelta: ¿qué inescrutables caminos son estos por los que vago?  ¿Será esta la señal de que alguién trata de llevarme nuevamente al sendero de los devotos? 
¿Será que tendré que casarme? Tendrá que ser en un domingo sin fútbol.


EL ABC DEL FÚTBOL

Estrenamos sección concurso en el blog. Cada semana yo subiré un video con alguna jugada, y vosotros tenéis que encontrar el mayor número de errores dentro de la jugada que alguna vez hayáis oído a alguien decir "eso es el ABC del fútbol”. Por ejemplo, pasársela a un jugador de espaldas, dejar sacar una falta rápidamente etc.
El que diga más en los comentarios se llevará algo de premio, todavía por decidir.

El principal protagonista de la jugada es un viejo conocido de este blog, y protagonista de un axeltorrismos, el Bremer De Bruyne. Y los de rojo, todos ellos que de una manera u otra le dejan pasar milagrosamente, son el Fortuna, los cuales son la evidente inspiración de esta sección:

NOTA FUTBOLÍSTICA El Fortuna sigue sin ganar. La frustación crece a medida que el Augsburgo va recortando puntos: ya son sólo tres de ventaja sobre el puesto de promoción. La situación es límite, los fans lo saben y están llenado el campo cada partido, pero seguimos encajando los goles más tontos que he visto en mi vida. A ese que tenéis arriba, le siguió uno en propia meta para empatar a dos. Auténtico dadaísmo. PRÓXIMO PARTIDO Viajamos a Hamburgo a jugar contra el Hamburgo que todavía tiene opciones de colarse en Europa. En la ciudad el pánico es total y absoluto. INTERVENCIONES RADIOFÓNICAS El viernes estaré en riguroso directo en la Guía del Bonvivant en Radio Marca con Miguel Ángel Méndez, David Sánchez y Eduardo Schell dando consejos gastronómicos, turísticos y cerveceros a todos los seguidores de Real Madrid y Barcelona que vayan a visitar Dortmund y Múnich la semana que viene. Colgaré un post el viernes también con más detalles a tener en cuenta.